La intención de Jordi Salvador en Montaña y empresa es explicar la conexión que para él existe entre algo aparentemente tan distante como el alpinismo y la empresa, y cómo trasladarlo de un espacio al otro. Como dice Sebastián Álvaro en el prólogo:
«Este libro de Jordi Salvador trata precisamente de cómo pueden aplicarse las enseñanzas de la Montaña a la hora de afrontar los retos que se plantean, sean en una empresa o en la vida, aprender de los errores que cometemos y, sobre todo, como levantarse; saber crecer en momentos de crisis y reinventarse haciendo de la vida la mejor de las aventuras. Son las cualidades de los grandes aventureros».
Sebastián Álvaro
Jordi Salvador es consultor de empresas y formador de directivos con más de 40 años de carrera profesional, además de experimentado alpinista en montañas de todo el mundo. Se dio cuenta hace tiempo que muchas de las cosas que le han hecho crecer como persona proceden de sus experiencias en la montaña.
«A mí me ha servido y desde que lo descubrí estoy seguro de que he ayudado también a muchos empresarios, directivos, mandos intermedios y demás participantes que han asistido a mis cursos y charlas, ya que resulta más fácil visualizar los aspectos que influyen en los resultados de tu empresa cuando se ponen ejemplos tan visuales como las situaciones que se presentan en la práctica del alpinismo».
Jordi Salvador Montaña y empresa
De la mano de explicaciones y anécdotas consigue hacernos visualizar la importancia que tiene el poder aplicar los valores, las habilidades y las experiencias que se viven en la montaña al mundo de la empresa.
Desde elegir al compañero de cordada, saber gestionar el riesgo o trabajar en equipo.
«Valores como la solidaridad o el trabajo en equipo, competencias como la resiliencia, el liderazgo, la proactividad, la gestión de proyectos o la capacidad organizativa, así como la combinación de experiencia y capacidades técnicas, son críticas en la gestión de situaciones complejas. Jordi Salvador nos explica, a través de historias de montaña y experiencias personales, cómo cada una de estas habilidades y valores deviene fundamental a la hora de conseguir metas en la montaña y en la empresa».
Cristian Rodríguez-Ferrera y Jordi Torroella
Fundadores y socios de ClusterIM
Todo esto lo relata desde su experiencia de alpinista y de empresario, asesor y emprendedor. Y habla de lo humano ya que asegura que las actividades en la montaña le han ayudado a entender mejor a las personas, descubrir cómo son y cómo somos realmente.
«La gestión de las personas, es lo que resulta más complicado, tanto en las expediciones a altas cumbres, como en las empresas (independientemente de su tamaño). Los egos, las distintas personalidades y las agendas ocultas son de todo menos fáciles de llevar, y complicadas de cohesionar para formar un buen equipo, base imprescindible del éxito».
Jordi Salvador Montaña y empresa
Habla de los principales valores que la montaña le ha ayudado a desarrollar y también algunas cualidades que le han hecho crecer como persona y como profesional. Además de diferentes características de su manera de ver la empresa que se han moldeado en las montañas.
Asumir las responsabilidades. No invita a buscar culpables o flagelarse sino aprender de cada ocasión ya que es una nueva oportunidad para crecer: «Si no somos parte del problema, nunca podremos ser parte de la solución».
Trabajo en equipo. La mayoría de actividades y expediciones que ha realizado las ha hecho en compañía de otros alpinistas y en estas ocasiones ha aprendido mucho sobre el valor del trabajo en equipo y de estar unidos en un objetivo común. Según su visión el mayor reto para una empresa, que además indica que se ha conseguido un excelente equipo, es tener empleados felices y que se lo pasen bien, incluso a pesar de todas las dificultades.
«No olvidemos que el alpinismo es muy duro y exigente no solo a nivel físico debido al esfuerzo, las incomodidades y las bajas temperaturas habituales, sino también a nivel psicológico, y sin embargo, lo practicamos porque nos aporta felicidad. Eso es lo que deberíamos conseguir también en las empresas».
Jordi Salvador Montaña y empresa
«Algo que define el equipo es que el resultado siempre es mayor que la suma de sus individualidades. Desde que lo descubrí y entendí que debía incorporarlo a mi ADN, trato de aportar lo máximo posible a cada trabajo que realizo y de buscar, al mismo tiempo, aquellos factores del entorno que me ayuden a sentirme motivado para afrontar cada nuevo día. Y si no lo consigo, me busco otro empleo donde pueda aplicar mejor estos conceptos».
Jordi Salvador Montaña y empresa
Generosidad. Para el autor es muy importante compartir conocimientos e información, tal y como sucede en la escalada cuando un escalador experimentado hace cordada con un joven impetuoso. Esa generosidad que nos hace reconocer que todos hemos encontrado a lo largo de nuestro camino personas que nos han enseñado y transmitido sus conocimientos.
«Debemos darles las gracias y tomar ejemplo para hacer lo mismo con los demás, con aquellos que comienzan a dar sus primeros pasos con nosotros. Con nuestra experiencia, siempre podremos hacer que otros crezcan a nuestro lado. Los que no respeten esta premisa ni nos interesa tenerlos por encima, ni debemos tenerlos por debajo».
Jordi Salvador Montaña y empresa
También profundiza en la resiliencia y la creatividad. Asegura que la montaña le ha ayudado a mantener algo de ese espíritu creativo y soñador que tenemos en la infancia y que en términos de empresa le ayuda a abordar el mismo problema con distintas soluciones.
Anima a disfrutar explorando lo que hay más allá de esa línea imaginaria en la que empieza lo desconocido.
Habla de la gestión de las emociones y hace hincapié en el miedo y cómo la montaña le ha ayudado a aprender a controlarlo.
«Mi consejo para los casos de “miedo empresarial” es el mismo que me aplico en la montaña, donde por un error en la decisión que tome no pierdo un negocio, una venta o un empleo, sino algo más preciado, al menos para mí: mi vida. No salgamos corriendo sin saber a dónde ni por qué; tomémonos el tiempo necesario para analizar qué es lo que está pasando y, de las opciones que se nos ocurran en el tiempo que dispongamos para reflexionar, tomemos la mejor o la menos mala. Como diría cualquier jugador de ajedrez, más vale prever alguna jugada, aunque sea mala, que no tener ninguna».
Jordi Salvador Montaña y empresa
Jordi dedica una parte importante también a la flexibilidad y adaptación ante los cambios que según su experiencia es de las cosas que más nos cuesta gestionar. Aunque asegura que no hay que confundir la falta de planificación o estrategia con flexibilidad y adaptación al cambio.
«Abrir nuestra mente a los cambios, en muchas ocasiones inevitables, nos permite afrontarlos con una mejor predisposición. Y aceptar que los cambios son una oportunidad para descubrir cosas mejores nos evita sufrir innecesariamente por algo que ni siquiera conocemos, solamente porque es diferente a lo que estamos acostumbrados».
Jordi Salvador Montaña y empresa
Todo esto adornado con unas referencias históricas muy precisas para poner en contexto y entender la evolución del alpinismo y la escalada. Desde Hermman Bhul a Messner, Yosemite y las grandes paredes o la escalada deportiva…
Y para terminar hace hincapié en la enfermedad, que le ayudó a entender cómo reaccionaba ante una grave situación, y le dio la oportunidad de aplicar gran parte de sus conocimientos y experiencias en la montaña. En Montaña y empresa pone el ejemplo de su ascensión al Aconcagua cuando le diagnosticaron un cáncer de próstata, como un supraobjetivo inspirador:
«Actuar como si no ocurriera nada o esperar a que alguien te solucione los problemas es algo que, en la montaña, suele acabar fatal. Uno debe ponerse de frente a la situación, valorar la mejor opción y hacer todo lo posible para salir airoso. No hay más.
Jordi Salvador Montaña y empresa
Para mí, el Aconcagua tuvo un significado especial ya que no solo consistía en alcanzar una cumbre importante, sino que implicaba un supraobjetivo, en el sentido de que la expedición a esa cumbre la organicé con el propósito de cargar mi espíritu de toda la fuerza posible para enfrentarme al verdadero reto de mi vida, que no era otro en ese momento que superar una grave enfermedad».
Montaña y empresa trata de adversidades, aprendizajes y valentía. De la importancia de la actitud con la que te enfrentas a cada circunstancia y también a cada resultado. Lo que un primer momento nos parece negativo, un camino oscuro o una cumbre fallida a la larga puede resultar un gran regalo, salvar la vida o encontrar algo maravilloso tras ese camino angosto. A lo que no habríamos llegado de otra manera.
«Incluso cuando he vivido situaciones aparentemente malas, después de analizarlas con la perspectiva que da el paso del tiempo, llego a la conclusión de que han sido positivas y que han servido para mejorar, aprender o para que posteriormente ocurriese algo interesante que, sin el cambio precedente, jamás habría ocurrido».
Jordi Salvador Montaña y empresa