El monte Aconcagua (6.962 m) ha sido testigo de excepción de una realización que desafía la capacidad de imaginación y fantasía del más pintado. El niño estadounidense de 9 años de edad Tyler Armstrong alcanzaba a finales de diciembre la cumbre de la montaña más alta de América, batiendo el récord de precocidad en esta cima. Según cuentan las fuentes, lo hizo en compañía de su padre Kevin Armstrong y del sherpa Lhawang Dhondup.
Los tres completaron la ascensión el 24 de diciembre, tras dos semanas de trabajo en la montaña, después de recorrer la ruta del Glaciar de los Polacos. «Se puede ver realmente la atmósfera del planeta desde ahí arriba», comentaba el propio Tyler Armstrong a la agencia Associated Press hace unos días al respecto de su aventura. «Las nubes están por debajo de ti y verdaderamente hace frío».
La cumbre del joven estadounidense es sin duda excepcional, incluso por el hecho de que normalmente no se expiden permisos de ascensión para menores de 14 años. En este sentido, ha sido clave la actuación de sus padres, quienes consiguieron convencer a las autoridades del país argentino que, a pesar de su juventud, Tyler contaba con una experiencia contrastada que le iba a permitir afrontar sin problema alguno la ascensión a través del Glaciar de los Polacos.
En este sentido, la página web TopWithTyler.com, que sigue las aventuras montañeras del pequeño alpinista, cuenta que Tyler Armstrong ya había ascendido anteriormente el Kilimanjaro (5.892 m, a los 8 años), así como otras varias montañas de América del Norte entre las que destaca el Mt. Whitney (4.418 m), el techo de California, cuando tenía 7 años. Además, había realizado la triple ascensión en el día del Mt. Shields (3.255 m), el Mt. San Bernardino Este (3.259 m) y el Mt. Anderson (3.304 m) durante su preparación para el Aconcagua.
Fin solidario
Aunque el objetivo deportivo de Tyler Armstrong es intentar completar el proyecto de las Siete Cimas, para el que sus padres han contratado un equipo de abogados que realiza las a menudo difíciles gestiones para obtener los permisos de ascensión, su carrera alpinística tiene también un fin solidario. A través de su página web, recauda fondos para ayudarle a financiar sus expediciones y también donaciones para la asociación CureDuchenne. Esta institución trabaja en apoyo de los afectados por distrofia muscular de Duchenne, una enfermedad hereditaria que se estima afecta a uno de cada 3.500 niños y cuya esperanza de vida no va más allá de los veintitantos años. Según las fuentes, a través de su página web, Tyler Armstrong habría contribuido a recaudar miles de dólares para este fin solidario.
En cualquier caso, las comparaciones son inevitables y las ascensiones de Tyler Armstrong recuerdan a las de otro niño estadounidense que revolucionó el mundo alpinístico en 2010. Se trata de Jordan Romero, quien en aquel entonces se convirtió en la persona más joven en ascender el Everest, al hacerlo con 13 años. El año siguiente, en diciembre de 2011 y con 15 años de edad, completó las Siete Cimas tras ascender el Monte Vinson (4.892 m) en la Antártida. Actualmente, Jordan Romero se encuentra preparando el proyecto de añadir el Polo Norte y el Polo Sur a su currículum.
Lecturas relacionadas
![Portada de la revista Desnivel nº 331. Enero 2014. [WEB] ()](https://www.desnivel.com/images/2013/12/d331_g-150x211.jpg)
Desnivel nº331
En este número: ENTREVISTA Simone Moro • ROCA CL SICA La gran travesía pirenaica • ESCALADA EN M XICO El …
- Etiquetas: Aconcagua, Tyler Armstrong
16 comentarios
Sobre si es una estupidez o una locura la verdad es que todos hacemos estupideces. Al niño se le ve contento… Si por mala suerte pilla un edema o un accidente o lo que sea, será como siempre… familia y amigos destrozados, tengas 9 o 40 años. Si no implica a terceras personas ( como con el alcohol al volante) …vive y deja vivir!
Yo lo que no comparto es esto de mezclar y enmascarar la financiación de las siete cumbres para el niño con una actividad solidaria. Quien controla lo que va a parar a un sitio u otro? Realmente se esta dandoo el dinero para los que padecen esa enfermedad o para que un niño o sus padres tengan el capricho de hacer las siete cumbres.
Estoy con Ciro. No se puede ser más cretino. Desgraciadamente cada vez se ven más niños haciendo actividades impulsadas unicamente por los padres (incluyo el karting), yo no soy tan pesimista, pero subirse al Aconcagua ye otra cosa.
Hace un tiempo salió una escena en la que un niño era arrojado desde un avión en paracaídas para que sus padres se sintieran orgullosos. Los padres vieron desde abajo caer a su hijo pero como un fardo, pues no se abrió el paracaídas. Qué lleva a unos padres a cometer la locura en el cuerpo de su hijo. Que un muchacho con ocho o nueve años se embarque, no en el montañismo, sino en el coleccionismo de montañas, solo puede responder a una locura de los padres. Espero que no tengan que arrepentirse.
yo personalmente creo que el de 13 no es subir es que te suban mirad mi blog (esta en catalan pero se puede treducir)
De padres tontos,pueden salir hijos tontos.
Pero no habian prohibido el acceso a las «altas cumbres» para los menores de 18 años? Al menos en el Everest ya no dejan subir menores para batir records estupidos…
Cuanta subnormalidad
Pero cómo va a llevar casco? si es la montaña más alta de América? de más arriba no pueden caer piedras.
Y NO LLEVA CASCO…padres irresponsables¡¡¡¡