Martín Elías, Jérome Sullivan y François Poncet llevaron a cabo entre el 18 y el 19 de octubre una remarcable apertura en Patagonia. Se trata de la primera ascensión del pilar Sur del Cerro San Lorenzo que, a decir de Rolando Garibotti, cronista patagónico, es “una enorme torre de roca que probablemente era una de las cumbres vírgenes más difíciles que quedaban por hacer en el sur patagónico”.
El terceto de guías de montaña realizó la aproximación a la base del pilar desde el norte y comenzaron a escalar en el lado izquierdo de la cara este para pasar inmediatamente a la cara sur. El primer tramo de la escalada, todavía en la cara este, incluye las primeras dificultades técnicas del recorrido de 1.200 metros, graduadas en M7.
Vivac y chimenea de roca mala
Ya en la cara sur, superaron un par de campas de nieve a 50º separadas por un breve goulotte, antes de desviarse hacia la derecha para afrontar tres largos de mixto (M5) y vivaquear justo debajo de una chimenea de roca muy mala que se convirtió en el tramo clave de la escalada.
La superaron a la mañana siguiente con dos largos de A2 y A3 y salieron de ella por cuatro largos mixtos y un tramo de nieve a 50º que les llevó a la arista. Desde allí, negociaron la sección final de roca hasta la cumbre, situada a 3.150 metros de altitud.
“Muchos pequeños milagros”
Los protagonistas todavía no han brindado demasiada información de los detalles íntimos de su ascensión, aunque Martín Elías sí ha informado a Desnivel.com que “la ruta la hicimos en estilo alpino, por supuesto”.
Respecto al nombre, La Milagrosa, el alpinista riojano afincado en Chamonix apunta que “viene porque tuvimos muchos pequeños milagros durante la ascensión y en general en todo el viaje”. Suena a historia interesante…