‘TRÍO DE ASES’

Jonatan García enlaza las crestas de Salenques, Llosas y Alba en 20 horas

Salió en bici de su casa en Benasque a las 3:00 horas de la madrugada y regresó a las 23:08 horas de la noche, tras haber recorrido 59 km y haber superado 4.315 metros de desnivel positivo en su particular ‘Trío de ases’.

Jonatan García en la en el enlace de las crestas de Salenques, Llosas y Alba
Jonatan García en la en el enlace de las crestas de Salenques, Llosas y Alba
| 9 comentarios |

Jonatan García ha completado otro de sus desafíos personalísimos en el valle de Benasque. Esta vez ha enlazado tres crestas tan clásicas como la cresta de Salenques-Tempestades, la cresta de Llosas y la cresta de los 15 Gendarmes de Alba en el día. En realidad, en 20 horas y 8 minutos, de Benasque a Benasque, en bici y a pie.

Trío de Ases

El alpinista afincado en Benasque sitúa esta actividad en la línea de otros proyectos que ya había realizado anteriormente, como el de los 51 tresmiles del macizo Maladeta-Anelo que realizó en 34 horas desde Benasque el año pasado, una aventura que bautizó como La vuelta al mundo (67 km, 6.129 metros de desnivel positivo). Ya entonces enlazó las crestas de Salenques y de Llosas, con lo que el proyecto de unir las tres era una consecuencia lógica.

Pero, ¿por qué hacer este tipo de actividad?: “Para mí, por dos razones fundamentales. La primera es que me hace ilusión hacer en 20 horas lo que antes tardaba tres días; y la segunda porque me gusta mezclar varias actividades en una como ir en bici, correr, escalar o volar en parapente”, explica Jonatan.

Así fue como nació Trío de ases, que es como ha llamado a esta ruta de 59 kilómetros de distancia y 4.315 metros de desnivel positivo, con dificultades máximas de V+.

El recorrido

Siguiendo su propia filosofía, el recorrido de Trío de ases comienza desde la puerta de su casa en Benasque. Allí, montó en su mountain bike a las tres de la madrugada para dirigirse hasta La Besurta, donde dejó la bicicleta para escalar la cresta de Salenques – Tempestades hasta la cima del Aneto.

Luego, se bajó hasta el collado de Coronas y siguió descendiendo hasta el Ibón Inferior de Coronas, para enlazar con la cresta de Llosas, que finaliza de nuevo en la cumbre del Aneto. Esta vez, en el collado de Coronas se dirigió hacia el Portillón Superior y realizó un flanqueo por debajo del glaciar de la Maladeta para saltar la arista y cruzar hacia la vaguada de Baños de Benasque.

Desde allí, emprendió la cresta de los 15 Gendarmes de Alba hasta el pico de Alba. El último descenso, ya anocheciendo, fue realizado por la ruta normal hasta el refugio de La Renclusa y de ahí a La Besurta para recuperar la bicicleta y regresar a casa.

Cuerda, solo para dos rápeles

“Técnicamente, pienso que la menos técnica es la cresta de Llosas y considero que las otras dos son técnicas”, precisa Jonatan García, quien añade que “lo que pasa es que habré escalado las crestas de Llosas y de Salenques entre 35 y 38 veces, y unas 30 de ellas solo y sin cuerda (la de Alba, igual la he hecho solamente cuatro veces solo y sin cuerda). O sea, que me conozco bastante bien el terreno”.

Esa es la clave para poder realizar una actividad como esta en un tiempo tan reducido: “Mi idea es moverme rápido y con seguridad; eso es lo que yo busco, no solo el ir más rápido”. Y es que Jonatan García solamente usó la cuerda dos veces en todo el recorrido: para un rápel de 40 metros en una aguja de la cresta de Llosas y para otro rápel de 15 metros en la cresta de los 15 Gendarmes de Alba.

Para su Trío de ases, llevó una mochila de 15 litros, en la que cargó una cuerda de 40 metros (7,5 mm), el Escaper de Beal, arnés, casco, reverso con mosquetón, un cabo de anclaje con un mosquetón, crampones, dos bastones, un chubasquero de Gore-tex, un forro polar fino, cuatro geles, dos barritas y dos bidones con un total de 1,2 litros de agua, además de pastillas isotónicas. “Creo que se podría hacer más rápido sin perder seguridad, sobre todo en la sección de bicicleta y en las aproximaciones”, estima Jonatan, que apunta directamente a “ir más ligero, con una bicicleta nueva –llevo una Bianchi de treinta años que me regaló un amigo–, sin el forro polar, con una cuerda de 6 mm y con unos crampones más ligeros”.

Planificación concienzuda

Además del enorme conocimiento que tiene del terreno, Jonatan García no dejó ni un detalle al azar en su planificación de la aventura. “Había hecho las tres crestas por separado hace menos de quince días, para recordar los pasos y las condiciones”, señala. Además, los días anteriores estuvo analizando las previsiones meteorológicas con mucho cuidado: “miré todos los partes disponibles, tanto de la mañana como de la tarde y de la noche, porque son muchas horas. Daban alta probabilidad de tormenta en el Pirineo catalán –que queda muy cerca– y alguna probabilidad en el Pirineo aragonés. Tuve suerte porque escuché de cerca las tronadas de la tarde, aunque a mí no me llovió. Si no, hubiera tenido que cancelar la actividad y asumir más riesgo para bajarme de allí con todo aquello mojado”.

Y es que se trata de una actividad larga, que él solo recomienda bajo fuertes dosis de “sentido común”. “Es algo muy personal y cada uno tiene que ver en qué condiciones físicas, técnicas y mentales está para poder hacerla o no”, advierte, y agrega que “a mí me gustaría también hacer actividades que he visto que hace gente a la que sigo en los Alpes, pero primero tendría que hacer cada arista por separado con amigos y encordado; no hay que aventurarse por donde no conoces. Ten en cuenta que yo salgo 250 días al año por este terreno”.

Planes de futuro

Jonatan García no tiene, por ahora, más planes que los de disfrutar de su bebé de siete meses en casa e ir de vacaciones a Chamonix este verano. “Quiero hacer algunas clásicas allí, y también tengo bastantes proyectos buenos en el valle de Benasque, que a veces no valoramos lo que tenemos cerca y hay dos aristas a veinte minutos de casa que todavía tengo pendientes de hacer”.

De momento, no tiene ningún plan para el otoño, aunque no descarta volver a Nepal, donde estuvo por última vez a finales de este mismo invierno para intentar el Gangapurna con Esteban ‘Topo’ Mena.

Comentarios
9 comentarios
  1. buenas. vaya calcetinada!
    veo que por aqui el personal pilota… sabeis si pueden escaquearse los rapeles descritos en las crestas? gracias

  2. ja go, también me parece mucho más interesante el tipo de alpinismo que defiendes, pero no dejan de asombrarme los horarios y enlaces del Jonatan.

  3. Ohh Aure (por cierto qué nombre es ese), resulta taaan tierno ver a un hater ofendidito y encima pidiendo respeto . . . pareces Kanye West o un rapero cualquiera de L.A. No serás de esos montañeros incoherentes que no difunden sus actividades porqué para ti “solo cuenta el placer de hacerlas” y luego resulta que te pones nervioso cuando otros lo hacen?

  4. Pero que alpinismo de velocidad???
    El alpinismo es otra cosa,hacer una actividad que conoces como los futbolistas conocen el campo de fútbol no lo veo relevante…sabes dónde vas donde apretar que material llevar (apurando gramos)
    Lo veo más similar a la escalada deportiva….

  5. Aunque no lo creas gres (por cierto que nombre es ese)hay mucha gente que hace las cosas por el placer de hacerlas y sin la necesidad de publicarlas. Hermann Buhl ya salía de su casa en bici para escalar en los Alpes, ¿Datos? No voy a alimentar tu curiosidad ni la de nadie, cuando se a hecho si no se a publicado es por algo.
    Y otra cosa el único que de manera diplomática está faltando el respeto eres tú.

  6. El alpinismo en solitario de velocidad es una evolución lógica del montañismo y nos puede gustar más o menos, como el dry-tooling o las carreras de montaña. Si no nos interesa, podemos por supuesto criticarlo, podemos no leer las noticias al respecto . . . pero desmerecerlo me parece soberanamente cutre. Por lo menos Jonatan lo hace en los Pirineos. O los encadenes de actividades solo se pueden hacer en los Alpes?
    A ver, hater Aure Sanz, cuantas veces dices que se ha hecho esta actividad? Con mejores horarios? Puedes aportar datos? Y tu, hater ja go, seguro que después de hacer Salenques-Tempestades y Llosás por la mañana te subes a pelo sin ningún temblor por la Cresta de Alba por la tarde. Y por supuesto que esto no es exploración, es todo lo contrario, es sacarle partido a lo que se conoce. No me parece mala idea.

  7. Vaya notición!!! Actividad realizada gran cantidad de veces a lo largo de muchos años con horarios mejores que el aquí descrito, en fin que entiendo que hay que alimentar las redes y los esponsor, pero uno se cansa de que se venda este deporte como si se acabará de inventar y eso ocurrió hace varios siglos, solo falta ponerle un nombre ¡Original! Como por ejemplo Skimo o Trail-running y así ya es totalmente distinto a lo que se a hecho toda la vida.

  8. No entiendo estás aventuras como noticia…
    Había más de exploración cuando en pabdemia ibas al Mercadona aver lo que quedaba XD

  9. Gran actividad, hace unos años hicimos lo mismo reseñado, sumando el larguisimo cordal Feixant-Mulleres saliendo y llegando a la boca sur del tunel de Viella tras pasar por Benasque.
    El digno “Pueterey” de los Pirineos!

Ayudarnos a difundir la cultura de la montaña

En Desnivel.com te ofrecemos gratuitamente la mejor información del mundo de la montaña. Puedes ayudarnos a difundir la cultura de la montaña comprando tus libros y guías en Libreriadesnivel.com y en nuestra Librería en el centro de Madrid, o bien suscribiéndote a nuestras revistas.

¡Suscríbete gratis al boletín Desnivel al día!

Estamos más ocupados que nunca y hay demasiada información, lo sabemos. Déjanos ayudarte. Te enviaremos todas las mañanas un e-mail con las historias y artículos más interesantes de montaña, escalada y cultura montañera.