«Guillermo ha decidido quedarse en el Himalaya. Le retienen asuntos importantes. Se ha instalado en la base del Ama Dablan, repanchingado, con ese sempiterno cigarrillo encendido y las manos bajo la cabeza para acometer la exigente tarea de soñar con rutas imposibles en su cara Oeste. Es un sitio privilegiado para hacerlo. Una magnífica atalaya que le va a permitir también dedicar su máxima atención a las cumbres de alrededor, que tampoco se librarán de recibir en sus flancos miles de trazados imaginarios, producto de su atento y prolongado escrutinio».
«Es una tarea que exige tiempo. Y Guillermo se lo va a conceder. Todo el tiempo del mundo.»
Palabras de despedida, la de un buen amigo suyo, Paco Aguado, con quien Guillermo Mateo llevaba compartiendo escaladas, expediciones y correrías casi tres décadas. Y las que quedaban… pues, a sus 47 años, Guillermo acababa de tramitar su particular «jubilación anticipada», para dedicar todo su tiempo a los suyos, y su gran pasión, la escalada y las montañas.
Escalar, escalar y escalar…
G.Mateo/L.Alonso/J.I.Gordito
La familia de Guillermo ha querido comunicarnos que se realizará una celebración religiosa en su recuerdo el próximo viernes 2 de febrero, a las 20 horas, en la Parroquia del Santísimo Sacramento, en la calle Alcalde Sainz de Baranda 3 (casi esquina con Menéndez Pelayo, frente al Retiro).
Algunos días después, el 23 de dicho mes, sus amigos más próximos, compañeros de escalada, viajes, juergas y expediciones, se reunirán en la Librería Desnivel para despedir a Guillermo mediante imágenes, anécdotas y recuerdos. Y no será pocos, durante una proyección que recogerá tanto su trayectoria alpinística, dilatada, densa y brillante, como esas fotos más gamberras, que tampoco eran pocas. «Porque era muy gamberro», asegura Paco. Y también, un genial desencadenador de anécdotas, cómo cuando durante un viaje invernal a Canadá, respetuoso y “acojonado” porque pudiera saltar la alarma anti-incendios de la habitación, Guillermo salía a la calle a fumar, exponiéndose incluso a -40ºC con tal de satisfacer su pasión.