Para empezar con las cifras, cabe recordar que estar en el punto más alto de las 50 provincias implica subir 45 montañas, ya que cinco de ellas se pueden considerar “montaña comodín” al ser simultáneamente la cima de dos provincias. Es el caso de Peñalara, Moncayo, Gorbea, Peña Trevinca y Torrecerredo. Pero, más allá de este detalle técnico, hay otras cifras que ayudan a comprender la dimensión del proyecto.

Han sido 14.000 km de carreteras en busca de los momentos propicios para cada montaña, 32.500 metros de desnivel positivo acumulado, 88 días de viaje, 6 controles de movilidad ocasionados por las restricciones de la pandemia, 36 compañeros ocasionales (habrían sido muchos más de no ser por el estado de alarma), casi 250 horas efectivas de actividad…
Inicio prometedor y Filomena
En un proyecto con tantos objetivos, era fundamental aprovechar al máximo el tiempo. Para ello las primeras dos semanas fueron una auténtica carrera para “tachar” la mayor cantidad posible de cimas accesibles en el sur y el levante. Eran días de tiempo estable, poca nieve y rutas sin dificultad técnica.
Para la gran mayoría de la gente, la llegada de Filomena podría marcar el devenir del reto, pero en realidad algunos días antes la península ya se había cubierto de nieve. Llegaron ascensos muy fríos como el del Canchal de la Ceja (Salamanca) a -18° o el Mogorrita (Cuenca) a -15°. Pero, sobre todo, hubo que pelear con cantidades de nieve inmisericordes que multiplicaron las horas de ascensión en casi todas las montañas. (Moncayo 10 horas, Almanzor 14 horas, Peña Trevinca 11 horas…).
Un respiro en las islas
Por suerte, tanto el ascenso al Puigmajor en Mallorca, como los de el Morrón de la Agujereada en Gran Canaria y el Teide en Tenerife, se convirtieron en pequeñas vacaciones dentro de esta locura de kilómetros, borrascas, noches de furgoneta y comidas precarias… pero faltaba el esfuerzo final que incluía los Pirineos, Galicia y la cornisa cantábrica. Mucho trabajo para una estación tan inestable.
Mal tiempo, prisas y esfuerzo final
La llegada a Galicia coincide con un frente lluvioso que me detiene durante una semana. El margen ganado durante el principio del invierno empieza a desaparecer y el calendario se va ajustando. Cumbres fáciles como el Pilar, Faro, Aitxuri, Gorbea… se van intercalando con otras más comprometidas como Peña Prieta Sur, la Mesa de los Tres Reyes, el Mustallar o la Torre Blanca.
Faltan 10 días para el final del invierno y el tiempo no da muchas esperanzas, de modo que no me queda más remedio que encadenar las cimas de la Pica d´Estats y el Aneto en poco más de 24 horas para afrontar la escalada de Torrecerredo en unas condiciones invernales espectaculares. Por suerte, la última semana del invierno me regala una escueta ventana de buen tiempo que aprovechamos para culminar la interminable cabalgada invernal en la cumbre de los Picos de Europa.
Definitivamente, las grandes aventuras no siempre están tan lejos como creemos. En un país lleno de montañas como el nuestro, siguen existiendo retos y opciones para todos los gustos. En este caso nada menos que 50.
[Nota de redacción: Javier Campos disponía de todos los permisos obligatorios para poder moverse entre provincias, dada su condición de profesional, con contrato de trabajo de una televisión pública para la grabación de un audiovisual de próxima emisión. La producción audiovisual se considera actividad esencial en el actual estado de alarma, como quedó estipulado en el Real Decreto 463/2020 del 14 de marzo]
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Pues no decís nada de txikon, o los nepalies k tb campaban a sus anchas pero mucho más lejos, o futbolistas, este hombre podría haber viajado a cualquier lado si hubiese querido, es un proyectazo en cuanto a logística, y si han sido 88 días y 14000 km, en bici todavía estaría cerca de casa, es un deportista profesional como txikon, os recomiendo ver su currículum, además de varios ochomiles tiene unas actividades muy interesantes, y entiendo k el tío tiene k darse publicidad para seguir su ritmo de expediciones, yo k estoy tb confinado y no puedo salir entiendo k esta gente tiene k seguir entrenando y haciendo ejercicio al más alto nivel, aunque esta hazaña no os parezca más que senderismo, a mi me parece un hito en invierno, si lo hubiera hecho corriendo sería la ostia, pero no es kilian, realmente es bueno en muchas facetas y no se dedica a una exclusivamente, pero esto no se hace en estadios como en el fútbol
Vivo en un 4o sin ascensor y he realizado la ascension en solo integral….2 veces en 24horas!! Me lo publicais también?? Gracias!!
Me imagino a este atleta de altísimo nivel subiendo el pico fuerte de Rostrogordo en Melilla con sus ni más ni menos de 135 metros de altitud! Ayudado por dos sherpas(dos paisanos de la zona), y tirando de oxígeno(cigarro va,cigarro viene),y ala vez en comunicación con desnivel para ir comentando cómo va la ascensión… y la editorial de desnivel dudando si publicar la primera invernal de los nepalíes al K2 o la ascensión de este señor…..
Javier Campos disponía de todos los permisos obligatorios para poder moverse entre provincias, dada su condición de profesional, con contrato de trabajo de una televisión pública para la grabación de un audiovisual de próxima emisión.
JAJAJA… No me digas que tenemos al próximo Calleja Labordeta ??? Pero que ridículos que sois intentando justificar las salidas de montaña de este GRAN DEPORTISTA DE ELITE DE MAXIMO NIVEL ! . JAJAJA.