Herve Barmasse recibió el 7 de marzo el premio Saint Vincent por su actividad como profesional de montaña del Valle de Aosta. Un mes antes, Herve, acompañado por Cristian Brenna, completaba la primera ascensión de la cara Noroeste del Cerro Piergiorgio, una cumbre de 2.719 metros, cercana al Cerro Torre y al Fitz Roy en la Patagonia Argentina. Erguido sobre el Glaciar Marconi, al norte del gurpo del Torre, su cumbre la alcanzaban el 8 de febrero, estableciendo La Routa de l´Hermano, con dificultades de A3 y 6b+ y recorriendo 950 metros en 33 horas.
Barmasse, que proviene de una larga estirpe de guías que han vivido a la sombra del Cervino, y Brenna no son los únicos italianos que han probado a resolver los misterios de la Noroeste del Piergiorgio, de hecho, un buen número de intentos a esta pared sugerente han sido protagonizados por equipos italianos, desde 1984 cuando un equipo trato de escalar el elegante pilar que se levanta a la derecha de la cara. Pilar que fue completado un año después por Mario Manica y Renzo Vettori, abriendo la excelente Greenpiece (6b, A1, 800 metros, más tarde liberada y cotada de 7a).
También se intentaron ataques frontales a dicha cara; en 1995 un equipo de ocho italianos, entre los que se encontraban Mario Conti y Casimiro Ferrari, llegaron a escalar 350 metros. Casi al mismo tiempo una cordada formada por Maurizio Giordani y Luca Maspes trataron de forzar una ruta más directa por la izquierda. Usando cuerdas fijas, la pareja resolvió tres cuartas partes de la pared antes de retirarse, dejando las cuerdas para un intento posterior. Esta ruta incompleta fue bautizada como Gringos locos (VII, 7A, A4, 700 metros, 21 largos). La cordada regresó al año siguiente pero encontraron las cuerdas en un estado lamentable y se negaron a repetir todo el proceso, dejando la cara Noroeste «real» sin ascensiones.
La cara se resiste
Después serían los franceses los que la intentaran. Un equipo liderado por Stephane Benoist se retiró cuando acababan de superar la centena de metros. De nuevo unos italianos, Girardi, Nadali y Sachi alcanzarón la cumbre abriendo Pepe rayo (VI, 7A, A3, 650 metros), aunque su línea se estiraba por la parte derecha de la vertiente, en un muro mucho más corto que el de la Noroeste.
En los años siguientes un puñado de cordadas también probaron suerte, incluyendo, en 2002, la alemana formada por Berecz y Tivadar, intento que acabó prematuramente cuando su tienda instalada al pie de la pared fue arrastrada (ocupantes incluidos) por el viento hasta el glaciar. En 2003, otro equipo italiano falló al intentar concluir la vía Ferrari, y a finales de 2005 el propio Barmasse, junto a Maspes, resolvían hasta once largos en la cara Noroeste. Maspes fue alcanzado por un desprendimiento de rocas y volvieron a casa. La Noroeste del Piergiorgio persistía, desafiante.
Echar el resto

Ahora, en 2008, Barmasse regresaba, formando equipo con Mario Conti, Giovanni Ongaro y Cristian Brenna. Su objetivo era la peligrosa Ferrari, y el escenario volvió a repetirse. La caída de un gran bloque de hielo rompió las manos de Ongaro. Con mucha dificultad lograron bajar al italiano, para emprender una penosa marcha hasta el Chalten. Conti se ofreció voluntario para acompañar a Ongaro al aeropuerto. Barmasse y Brenna volvieron para intentarlo una vez más.
El día 5, desde muy temprano, la cara Noroeste era barrida por el viento, ralentizando sobremanera la escalada y obligando a Cristian y Herve a regresar a la rimaya donde tenían instalado el Campo Base. El día siguiente se mostró más cálido y la noticia de que tres personas habían iniciado su actividad por el glaciar Marconi, una buena señal, animó a la cordada, decidiéndose ésta a repetir intento la mañana siguiente.
Cuando Conti, el día 7, llegó al campo de la rimaya pudo observar a sus compañeros en la pared, a buen ritmo y a una altura notable. Sabía que el tiempo iba a empeorar y debía avisarles por radio. Barmasse y Brenna recibieron la noticia sin demasiado sobresalto, ya habían decidido continuar. Llegaron a la cumbre a las dos de la mañana, tras haber completado la primera ascensión de la Noroeste del Cerro Piergiorgio.