Simon Gietl ha escrito un nuevo capítulo de su larga trayectoria de ascensiones invernales en solitario en Dolomitas. El escalador surtirolés, que este mismo mes completaba la travesía del Rosengarten también en solitario, ha realizado ahora la ascensión de la vía Hruschka en la cara norte del Peitlerkofel o Sass de Putia. La guinda de su aventura fue el descenso en parapente.
Al tercer intento
En esta ocasión, Simon Gietl ha querido puntualizar que la ascensión en solitario del Peitlerkofel no llegó a la primera. De hecho, había realizado dos intentos previos durante las semanas precedentes en los que se tuvo que retirar debido a que no estimó que las condiciones fueran adecuadas para su aventura. A sus 37 años, precisa que “es importante para mí saber lo que puedo hacer, pero es incluso más importante saber lo que no puedo hacer”.
A la tercera, sin embargo, fue la vencida. Conocía bien la montaña, pues ya la había escalado tres veces en otras épocas del año. Partió el sábado 19 de marzo a las siete de la mañana desde el paso Würzjoch, cargado con su mochila con todo el material necesario y un parapente ligero, y comenzó la ascensión propiamente dicha pasadas las ocho. A las 10:35 horas había coronado el Peitlerkofel y en la cima se encontró con dos amigos que habían subido por la vía ferrata.
Allí arriba, y dado que las condiciones eran perfectas para el despegue, los tres descendieron volando en parapente. Tras un vuelo de apenas ocho minutos y antes del mediodía, volvía al punto de partida.
- Etiquetas: Hruschka, Peitlerkofel, Simon Gietl
